jueves, 11 de marzo de 2010

Un horrible realidad...

Casos como este vemos a diario en nuestro país. El abuso del mas grande, del que mas dinero tiene y de las mismas autoridades... pan de todos los días.

Donde andarán los Derechos Humanos cuando a estas personas (en territorio privado o no) se les maltrata de esta forma? Donde estará la iglesia para proteger a estos hijos de Dios? Donde están los que protegen la vida? Donde están los que llenan los medios de comunicacion con promesas cuando necesitan un voto?
Campesinos que lo único que tienen es su hogar, su familia y lo poco que pueden conseguir.....

A donde irán estas almas solitarias en un país donde el que no tiene no vale nada?

Tengo el alma entristecida porque se que mi voz y la de muchos indignados se perderá en el limbo del cómodo silencio de los mas grandes.

Desde aquí un poco de paz a Don Ignacio Abreu Peralta y a toda su familia en Corral Grande, Dajabon.