Esclavas del espejo (un recuerdo viejo)

Para mi los fines de semanas largos siempre han sido sinónimos de "deconexion" total. Los adornos exteriores se quedan fuera de la maleta, o sea, nadaaaaa de maquillaje, nada de espejos, nada de ropa ajustada, nada de cabello planchado y brilloso, nada de tacos, nada de uñas pintadas, nada pero absolutamente nada que tenga que ver con asuntos de impresión social o resaltadores de estatus economicos.

Quizas por mi tipo de trabajo estoy un poco mas harta de todo lo que conlleva el proceso de transformacion de oruga a mariposa!!! Creanme.... las mujeres tenemos muchos trucos y secretos...pero si no fueran por esos momentos de "deconexion" me sentiria como en una tortura esclavizante y permanente de belleza.

Pero en medio de uno de esos fines de semana estando en La Romana..o deberia decir Romana? bueno en Casa de Campo senti que hay una "especie" que son fanaticas o esclavas (y esclavos) del espejo. Senti que estaba en medio de una pasarela en Milan.

Les cuento...

Decidimos ir a comer pizza en "La Marina" (francamente muyyy buenas) y para nuestra suerte pedimos una mesa que estaba justo en el lugar donde pasaba casi toda la gente que llegaba a cenar.

Me refiero a nuestra buena suerte porque disfrutamos de todo un show mientras cenamos.

Vimos pasar:

Mujeres con vestidos tipo tubos ajustados desde el cuello y hasta las rodillas que la hacian caminar como infantes aprendices porque apenas podian separar las piernas y para colmo de males llevaban unos zapatos tan altos que me transportaban a las fiestas de carnaval cuando disfrutaba de los zancos gigantezcos vestidos de "robalagallina".

Hombres con camisas super exclusivas y raras que iban desde blancas floreadas hasta naranja fluorescentes que molestaban a la vista! zapatos perfectamente combinados con correas y hasta con las billeteras!!!

Niños que gritaban y se molestaban por las telas de lino que raspaban su piel y poco le cubrian del viento que hacia esa noche y por supuesto las niñeras que corrian detras de ellos para que los padres pudieran comer placida y tranquilamente.

Pero ojooooo! eso no me sorprendio tanto como ver que la gente no conversaba. Hacian mimicas y actuaban como si se divertieran mientras sus ojos buscaban aprobacion, gente conocida para saludar o simplemente hacerse notar para no pasar desapercibido. Y se levantaban para ir al baño o pasearse con alguna excusa como un millon de vecesssss!!!!!

Saliiii de ahi con un diminito vestido blanco de algodon y mis chancletas de playa que imagino a algunas personas le habra resultado extraño y fuera del lugar !!! Pero felizzzzz de tener solo en mi cara la crema antienvejecimiento y una cola de caballo !!!!!! SIN "estres"!!! Felizzz! con cuatro pizzas de queso y rucula, una cocacola de dieta y mi hijo en brazos abrigado y sin "nana"...